Dentro de los objetivos de la rehabilitación en una persona con lesión medular se encuentra el desarrollo de la capacidad funcional hasta lograr la mayor autonomía posible. Para ello se trabaja por un lado la fuerza muscular residual y el ahorro energético, y por otro el entrenamiento en las Actividades Básicas e Instrumentales de la Vida Diaria.
Si las Actividades Básicas de la Vida Diaria (ABVD) son aquellas orientadas al autocuidado cotidiano, las Actividades Instrumentales (AIVD) engloban actividades más complejas donde se requiere de la capacidad para tomar decisiones y resolver problemas.
Para entrenar éstas últimas, en la FLM primero realizamos el aprendizaje en sala de rehabilitación y posteriormente procedemos a su ensayo en la Comunidad, lo que facilita la consecución de objetivos dentro del entorno de nuestros usuarios. Y hoy queremos hablaros de uno de los talleres que ofrecemos en Terapia Ocupacional, según los objetivos planteados, como es nuestro Huerto Urbano.
Aquí se plantan y cuidan hortalizas o frutos de temporada, con el objetivo de trabajar la destreza manipulativa, la coordinación bimanual y la sensibilidad táctil, además de favorecer las relaciones sociales y el reparto de tareas –al realizarlo en grupo–. Por otro lado el cuidar del huerto a lo largo del tiempo para poder obtener resultados implica también una constancia, de forma que cuando se recolecta la cosecha nos hacemos conscientes de que nuestra labor ha contribuido a finalizar el proceso de crecimiento y maduración. Además, aprovechamos los productos recolectados de nuestra huerta para emplearlos en el Taller de Cocina.
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